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jueves, 9 de mayo de 2019

V-E-day in Russia

El 9 de Mayo es uno de los puntos más altos de la humanidad. Pascua soviética, resurrección de la URSS después de su crucificción por el fascismo paneuropeo. El patrimonio del 9 de Mayo está formado por las poesías, literaturas y cine, equiparables por su calidad al Renacimiento, son una fuente del optimismo y la inspiración. No nos olvidemos de que el 9 de Mayo sea la final de la guerra en Europa (la URSS estuvo en esta guerra desde España), terminamos la 2GM en Asia en Septiembre (allí la URSS estuvo en guerra desde la invasión japonesa a China). O sea la URSS estuvo en la 2GM desde el inicio (España, China) y hasta el final (China).

Hoy en día la fiesta del 9 de Mayo está profanada en la UE por las elites “neutras”, que igualan su fascismo al comunismo ruso. En Rusia la fiesta está profanada por el putinismo: por un lado el sovietismo es el último refugio de los canallas y el grupo gobernante de Putin se adapta a la nostalgia pro soviética total del pueblo. Por el otro lado Rusia pos soviética está basada en la propaganda de Goebbels y vive cierta nacifiación desde arriba, igual que Ucrania, Kazakhstan o los bálticos. Aparecen los cosacos como un nuevo estrato social con su culto al ataman Krasnov, colaboracionista con los nazis. La Iglesia Ortodoxa Rusa fue unificada con la Iglesia Ortodoxa Rusa en el Extranjero, que apoyaba a los nazis. La bandera de Rusia es un tricolor del Ejército Ruso de Liberación (los soldados soviéticos echaron esta bandera entre otras banderas nazis al Mausoleo de Lenin durante el Desfile de la Victoria). El filósofo predilecto de Putin es un tal Ivan Ilyin, que con mucho gusto aceptó el nazismo alemán y promovía el fascismo paneuropeo.

O sea durante la celebración putinista del 9 de Mayo el Mausoleo de Lenin está tapado con una porqueria plástica, el ministro de la Defensa hace gestos mágicos religiosos, encima del Kremlin ondea la bandera del general Vlasov, toda la atención está centrada a la personalidad de Putin, inspirado por un filósofo pro nazi, Putin, rayado con el tema de los Romanov.

Los artistas serviles del régimen hacen las declaraciones públicas, que les dan pena tanto los nazis, como los rojos, que ambos lados eran víctimas de 2 totalitarismos y blablabla. No es un día de la Victoria, sino un día de la Tristeza y Reconciliación.

Sin embargo la RT sabrá mostrar toda la movida moscovita de tal modo, que en las periferias del mundo los televidentes vayan a pensar, que Putin sea un "comunista encubierto".

La amargura de la profanación del 9 de Mayo se acompaña también por el dolor de la impunidad del atentado del 2 de Mayo de 2014 en Odesa. El ejército de los trolles del régimen suele explicar, que la venganza debe ser el negocio de la gente de Odesa. También los trolles inculcan la idea, que los neonazis ucranianos sean todos agentes del Kremlin, necesarios para indignar la opinión europea. Que confusión esquizofrénica! A veces hasta aparecen los comentarios, que la tragedia ya fue vengada, pero en secreto (todo lo bueno del putinismo es un gran secreto). 

De todas formas, el 9 de Mayo para mi es un reproche. No es un motivo para decir: ¡vaya, que guapos somos! ¡Merecemos 13 días festivos en Mayo y 14 en enero! Al contrario, es una fecha para decir a sí mismo: debemos trabajar sin descanso para tomarse la revancha. No somos una horda de “untermensch”, como nos enseña el gobierno de Putin y el gobierno mundial, al contrario, tuvimos tiempos muy altos, el 9 de Mayo es una prueba de eso.

sábado, 20 de febrero de 2016

Rusia en el contexto de la teoría del sistema-mundo

Les presento un informe de Georgi Derlugian acerca de la história de Rusia através del prisma de la teoria del sistema-mundo. 

Georgi Derlugian es un sociologo formado en la URSS, que abandonó la patria en 1990 para trabajar al lado de Immanuel Wallerstein. Así que el tipo se quedó en el Occidente y por supuesto, ganando dólares, Georgi Derlugian tiene que sostener a propósito y fuera de propósito todo el repertorio de los tópicos rusofóbicos (las demasías exageradas de ivanoterrorismo, pedrograndismo, stalinismo, putinismo, etc.). Al mismo tiempo no cabe dudas, que ciertas observaciones, originadas por el Centro Fernand Braudel pueden ser útiles y interesantes.

El texto esta disponible aquí: RECONSIDERAR RUSIA 

Presten la atención que es un texto del año 2001, a lo largo de los últimos 15 años se han cambiado muchícimas cosas: ha sido renovado el grupo gobernante de Rusia, ha sido pagada la deuda externa de Rusia, etc.

Voy a presentar abajo algunos fragmentos de la lógica del analísis mundo-sistemático de GEORGI DERLUGIAN:


ETATISMO POR ENCIMA DE LA ACULUACIÓN CAPITALISTA


...es esencial tener en cuenta las limitaciones que el sistema-mundo impone al espacio de las decisiones políticas, tanto en ese país (Rusia) como en cualquier otro. Pero esas restricciones sólo aparecen con sus perfiles más nítidos frente al trasfondo de un pasado milenario que ha configurado el Estado y la sociedad rusos durante una longue durée excepcionalmente prolongada, desde la época de los vikingos hasta Breznev. El rasgo más característico de esa amplia trayectoria histórica ha sido el predominio de las actividades de construcción del Estado por encima de la acumulación capitalista, no como opción estratégica sino como adaptación organizativa al entorno geopolítico. Lo que en otros lugares era una de las principales funciones capitalistas, la creación continua de bases productivas con los consiguientes controles de la mano de obra y redes de distribución, en el caso ruso le ha tocado tradicionalmente a los gobernantes estatales. La razón subyacente era siempre la misma: los orígenes de las preocupaciones económicas de Rusia estaban enraizadas en la competencia geopolítica con un Occidente cada vez más capitalista. 

...Esa situación no era en absoluto excepcional. Todos los grandes imperios agrarios de los tiempos modernos –otomano, persa, chino, japonés o español– se enfrentaban a desafíos y restricciones semejantes. En cada uno de estos casos, la similitud de la posición del Estado originaba escisiones paralelas entre las reacciones culturales nacionalista y occidentalizante y las consiguientes luchas políticas; períodos de impasse y estancamiento; y brotes alternativos de reforma y revolución. En el contexto de esa tipología general, las ventajas clave del Estado ruso se hallaban en su combinación de una relativa proximidad cultural y geográfica a Europa, junto a un área territorial enorme e ingentes recursos naturales. 


La modernización de Ivan IV, el Severo 


.../Rusia /poseía una ventaja mucho más decisiva en el elástico modelo imperial que desempeñó un papel crucial en la primera revolución desde arriba conocida en la historia de Rusia, la transición a mediados del siglo XVI de una laxa confederación feudal a una autocracia centralizada, apoyada en el nuevo ejército permanente de la caballería dvoriane [noble] y la infantería de los mosqueteros streltsy [tiradores]. Rusia emergió así en las primeras filas de los tempranos imperios de la pólvora, con una organización similar a la de su no reconocido hermanastro heredero del imperio bizantino, la Turquía otomana


La modernización de Pedro I, el Grande


...Pedro el Grande elevó su imperio a los niveles contemporáneos de militarismo dictados por Occidente, permitiendo así a Rusia alcanzar una espléndida paridad con los depredadores más avanzados de la Europa continental. La clave para esa modernización del Estado zarista consistió menos en la importación de la organización o la tecnología occidental que en la expansión masiva de una nobleza dependiente del Estado, que se decuplicó y que fue inducida por la fuerza a nuevas carreras y formas de vida. Las reformas de Pedro crearon un robusto vector social para su edificio absolutista, pero también, en palabras de Georgi Fedotov, escindieron Rusia entre una estrecha nación de señores occidentalizados, separada del pueblo [narod] tradicionalista moscovita compuesto por el resto de capas no aristocráticas. 


Rumbo a la Revolución de 1905-1917


... Ese profundo foso iba a mantenerse hasta el siglo XX, cuando fue finalmente colmado por las calamitosas homogeneizaciones sociales de la guerra civil y el gran salto hacia adelante de Stalin.  El reinado de Pedro el Grande puso freno al expansionismo sueco y convirtió a Rusia en una potencia en el Báltico, pero también obligó a la monarquía a sostener los altos niveles de consumo socialmente prescrito a su occidentalizada nobleza de corte. Fue Catalina la Grande la que terminó con eso, conquistando tierras enormemente fértiles en el sur, donde los ejércitos rusos liquidaron por fin a la última horda nómada, el khanato de Crimea, y poniendo fin al Estado polaco y su desorganización interna. Los munificentes regalos a la nobleza de tierras y de los campesinos ligados a ellas ofrecieron nuevo esplendor y cohesión al absolutismo ruso. Catalina y sus ilustrados cortesanos hicieron grandes esfuerzos por elevar la productividad y eficiencia de la agricultura feudal. Se trató de una política explícitamente aristocrática, no constreñida por ningún tipo de preocupaciones burguesas, tendente a abastecer los mercados domésticos y ofrecer salidas exportadoras a las cosechas de cultivos comerciales generadas en los latifundios de los nobles, junto a una expansión de la servidumbre que se iba pareciendo cada vez más a la esclavitud de plantación. El Estado ruso se había convertido en un importante protagonista en Europa, y su influencia era mucho más espectacular confrontada con la decadencia del imperio otomano y su fracaso en el intento de modernización emprendido en ese mismo período. El despotismo ilustrado de Catalina fue el más exitoso de su tiempo. Pero del mismo modo que el legado de Iván IV no pudo igualar a la potencia sueca en la siguiente generación, el imperio de Catalina alcanzó su apogeo justo en la época en que las Revoluciones Industrial y Francesa se abrían camino en Occidente. El absolutismo ruso fue capaz de defenderse –por los pelos– del asalto napoleónico, pero el impacto económico de Manchester y lo que le siguió era harina de otro costal. Aunque sus tropas habían entrado en París, la base del poder internacional estaba cambiando. Por grande que fuera su tamaño, la adquisición de nuevas tierras seguida por su rápida colonización agrícola bajo moldes feudales no era suficiente para sostener a las elites rusas frente a un Occidente en rápida industrialización. Como cabía prever, conforme avanzaba el siglo XIX Rusia comenzó a experimentar los problemas típicos de las economías plantadoras periféricas: importaciones masivas de artículos de lujo, balanza comercial cada vez más desfavorable, pertinaz ineficiencia económica y tecnológica, restricciones al empresariado local, y un campesinado desmoralizado y sumido en la miseria. La reacción política contra esa situación vino en primera instancia de jóvenes aristócratas inspirados vagamente en las ideas revolucionarias francesas. La sublevación de los decembristas en 1825 se asemejó mucho a las conspiraciones liberales de la misma época en el sur de Europa, germinando en clubes de debate y gabinetes de oficiales. Los aristócratas rebeldes pretendían utilizar el poder del Estado para legislar normas más progresistas al estilo de Occidente, pero el zarismo, a diferencia de la monarquía hispana, había salido victorioso de las guerras napoleónicas y sofocó el levantamiento sin muchas dificultades. Rusia seguía siendo una gran potencia lo bastante fuerte para derrotar a polacos, persas o turcos, y capaz todavía de expandirse hacia el este, a las regiones atrasadas de Asia. 

...La inercia de la burocracia imperial y el egoísmo de la nobleza atrincherada en sus privilegios frustraron todos los intentos de propiciar desde arriba una modernización sostenida. A finales de la década de 1850 y durante la de 1860 comenzó a emerger y a prosperar una burguesía independiente, pero su ascenso se vio interrumpido por la depresión económica mundial de 1873-1896 –tasas de beneficio erráticas, grandes expansiones seguidas por enormes quiebras– ante la que los empresarios, que en otros lugares se protegían asociándose en cárteles o trusts, buscaron seguridad en el atronazgo burocrático. Entre las clases educadas, eso dejaba sola a la intelligentsia como candidata activa para una reconstrucción del país. Surgida de las reformas de la década de 1860, se trataba de una capa de especialistas formados profesionalmente, muy conscientes de su misión patriótica de dirigir el último intento de modernización de Rusia, que se convirtió en la principal fuente de fermento político en los últimos tiempos del zarismo. La intelligentsia rusa de ese período se encontró estructuralmente atrapada entre la ausencia de oportunidades para ejercer ningún tipo de responsabilidades políticas (ya que la autocracia seguía siendo demasiado fuerte), y la escasez de salidas hacia una vida profesional confortable como la que disfrutaban sus pares de Occidente (los mercados capitalistas locales seguían siendo demasiado estrechos para absorber una cantidad tan grande de abogados, médicos y técnicos especialistas). Esta doble limitación canalizó las energías y frustraciones de los intelectuales rusos hacia fines artísticos y filosóficos, agrios debates sobre reforma o revolución y actos quijotescos de desesperación heroica, mientras que la autocracia, paralizada por las presiones de distinto signo que se ejercían sobre ella, se resignaba a una morosa inacción o cuando más emprendía reformas muy parciales. Hasta la tercera generación, a comienzos del siglo XX, no se le presentó a la intelligentsia rusa una oportunidad para salir de su gueto. Una vez más, el catalizador del cambio fue el desplome de Rusia en la jerarquía de las potencias internacionales. La derrota en el Lejano Oriente a manos de Japón, un país cuya modernización dirigida por el Estado –también a partir de la década de 1860– había logrado triunfar allí donde Rusia había fracasado, desencadenó la revolución de 1905-1907. La derrota en Occidente a manos de Alemania, en una Guerra Mundial que desbarató a los ejércitos imperiales, detonó las Revoluciones de Febrero y Octubre de 1917. En ambas ocasiones, los únicos contendientes serios por el poder fueron diferentes partidos de la intelligentsia. Salió triunfante el más radical y disciplinado de todos ellos, el único capaz de poner freno a la rebelión campesina y de reconstruir el Estado, repeliendo las invasiones extranjeras e incorporando las insurreciones nacionales con el fin de reconquistar la mayor parte del territorio imperial. 


STALIN 


...Stalin utilizó la retórica y la visión escatológica de Marx, pero en cuestiones asuntos prácticos de construcción del Estado se atuvo a sus propias intuiciones brutales y al ejemplo de otros alemanes, en concreto Ludendorff y Rathenau, arquitectos de la economía de guerra guillermina. La «revolución desde arriba» estalinista de 1929-1934, colectivizando la agricultura y lanzando el primer Plan Quinquenal, combinó una versión extrema de mercantilismo militar con las instituciones dictatoriales
forjadas en la guerra civil. Los cuadros del partido, descorazonados durante el interludio de la NEP y la lucha fraccional, se sintieron de repente inspirados y dispuestos a llevar a cabo otra lucha épica, dirigida esta vez contra las masas rurales y las nacionalidades cuyos intereses supuestamente defendían los bolcheviques, entre otros. También la intelligentsia –gran parte de la cual se había exiliado o visto represaliada a raíz de la Revolución de Octubre– se hallaba ahora absolutamente rota, cuando los líderes del partido en torno a Stalin ajustaron a la baja el reclutamiento de gente con formación y mentalidad más toscas. Creyéndose una vanguardia autorizada a suprimir a «los elementos retrógrados» ciegos al sentido de la historia, esos cuadros terroristas iban a su vez a perecer en su mayoría en la subsiguiente Gran Purga, cuando fueron reemplazados por los obedientes burócratas de la promoción de 1938, que más Turquía ofrece de nuevo un paralelismo útil. Tras la derrota del Imperio Otomano en 1918, un grupo de la intelligentsia militar consiguió repudiar el pasado imperial casi en su integridad y movilizar al campesinado para la defensa patriótica, con un trasfondo de guerra civil. El nuevo Estado turco adoptó el mismo modelo alemán de mercantilismo geopolítico combinado con una ideología republicana y nacionalista. Los militares turcos, sin embargo, a diferencia de la intelligentsia civil rusa, se inspiraban ideológicamente en las tradiciones jacobinas francesas y leían a Durkheim más que a Marx. La esforzada industrialización general de la década de 1930, acicateada por el temor al cerco capitalista, transformó el aspecto de la sociedad soviética. La amplitud de la movilidad social y del cambio cultural experimentados por quienes crecieron y sobrevivieron a la modernización estalinista carecía de precedentes. Millones de campesinos analfabetos, rusos y no rusos, nacieron a una segunda vida como obreros industriales o empleados administrativos con cierta educación, por rudimentaria que fuera, y fueron transplantados a un ambiente urbano. La rapidez de esta transición creó en sus generaciones más jóvenes un sentimiento de genuino optimismo y lealtad hacia todo lo soviético, junto con la ardiente disposición a participar en una grandiosa construcción civil y militar. La homogeneización social resultante se solía considerar como demostración de las predicciones marxistas-leninistas referidas a la consecución de una auténtica sociedad comunista, sin divisiones de clase o bloqueos provocados por conflictos de nacionalidad. El resultado fue un Estado dictatorial volcado en la dirección de movilizaciones heroicas para alcanzar objetivos estratégicos, sin importar sus costes humanos o materiales, que quedó ademas revalidado en la Segunda Guerra Mundial frente al esperado asalto del Occidente capitalista. A diferencia de su predecesor zarista, el régimen estalinista pasó la prueba del ataque alemán con muy buena nota. La industria soviética superó a los nazis en tanques y aeroplanos, el Ejército Rojo aplastó a la Wehrmacht, y Moscú se hizo con el control de Europa oriental. Veinte años después, la URSS se equiparaba a Estados Unidos en armas atómicas y misiles. En el transcurso de una generación, un imperio agrario decrépito se había transformado en una superpotencia nuclear. Para un país «de desarrollo tardío» como Rusia, se trataba de una proeza apenas creíble. 


Los detalles del fracaso de la URSS


...Desde 1945 el Estado soviético –diseñado para campañas bélicas y producción en masa del armamento de la era industrial– había entrado en un largo período de paz, en el que se vio confrontado a tareas que le resultaban muy ajenas: en concreto, la producción y distribución, flexibles y eficientes en costes, de bienes de consumo y servicios. Sus fracasos en ese terreno son célebres, pero quizá se han exagerado un tanto. El salto adelante en el consumo de las masas soviéticas entre 1945 y 1975 fue sin discusión histórico, si bien se partía de un nivel extraordinariamente bajo. 

¿Por qué se desplomaron tan pronto sus expectativas de crecimiento? La respuesta está en la rápida transformación del campesinado en asalariados urbanos empleados por el vasto aparato monopolista del Estado soviético. Al quebrantar las economías campesinas, en gran medida autosuficientes, volcando sus desagregados miembros en los rígidos moldes de la industria, la burocracia y el ejército soviéticos, el Estado asumió la responsabilidad de todos los aspectos de la reproducción social y física de sus empleados: desde la salud, la educación y el bienestar hasta la alimentación, la ropa, los deportes y el ocio. Pero no bastaba suministrar simplemente sus rudimentos; la competencia de la Guerra Fría obligaba a que le Partido tuviera que superar los poderosos –y conscientemente propagandísticos– efectos demostrativos de los patrones de consumo occidentales. Los intentos de bloquear el flujo de información cultural acerca de éstos fueron en vano, no sólo debido a los modernos sistemas de comunicación, sino también a que la propia elite dominante (y más aún sus vástagos) resultaban fácilmente seducidos por el modo de vida capitalista. El poder, después de todo, lleva consigo la tentación de gozar de sus frutos materiales. 

...El final sobrevino inesperadamente. Atenazada por las contradicciones de su existencia corporativa, la nomenklatura soviética había jugueteado intermitentemente desde tiempos de Jruschov con varios sustitutos de la disciplina del mercado y la rendición de cuentas democrática, sin decidirse nunca a dar el salto a un diseño organizativo distinto. Los sucesivos intentos perezosos de reforma se hicieron por fin realidad con la perestroika de Gorbachov, que en su primera fase cuestionó los controles centralistas sobre todas las áreas de la vida soviética, para fracasar luego estrepitosamente en el intento de pasar a una segunda fase de creación de mecanismos de competencia, ya fuera en la economía o en la política. La iniciativa de Gorbachov, frustrada en la propia URSS, recibió el golpe de muerte en el extranjero. Fantaseando con el prestigio que quería labrarse en Occidente, cedió Europa del Este sin recibir apenas una propina a cambio, y se vio de repente apartado sin ceremonias, tanto por los amigos como por los enemigos internos. Aunque hubiera contado con un líder más capaz, la perestroika llegaba demasiado tarde, rodeada de presiones estratégicas crecientes, una decadencia económica profunda, la esclerosis administrativa y la desmoralización social. Pero no hay por qué ridiculizar a los envejecidos, amargados y aun así obstinadamente románticos shestidesiatniki que por fin habían tenido una oportunidad con Gorbachov; no tenían ninguna posibilidad de salvar a la Unión Soviética, cuya defunción estaba escrita desde la debacle de sus satélites en 1989, pero ayudaron a evitar una implosión catastrófica, ya que, sin ellos (y por supuesto el descrédito de los militares por la derrota en Afganistán), los últimos gobernantes de la URSS bien podrían haber sido del tipo de los chauvinistas reaccionarios que proliferaron durante la última década en Yugoslavia

...El colapso de la URSS marcó algo más que el fracaso del experimento bolchevique; señaló el fin de un milenio de historia rusa, durante el cual el Estado había constituido el motor principal del desarrollo social. 


Los años 70-80: el auge del enfrentamiento entre la URSS y los EE.UU.


...La Revolución Rusa de 1917 estableció el patrón contrahegemónico para poner en cuestión el orden capitalista mundial mediante la creación o reconstrucción revolucionaria de Estados periféricos bajo el liderazgo de las intelligentsias locales. La resaca duró hasta mediados de la década de 1970, cuando Estados Unidos tuvo que pagar el precio de su dislate al intentar reemplazar el poder colonial de Francia en Indochina, y las últimas grandes colonias, las posesiones portuguesas en África, alcanzaron la independencia política tras largas guerras de guerrillas. El régimen breznevita en la URSS, con su apoyo material a esos levantamientos antiimperialistas, se veía a sí mismo como vanguardia del progreso histórico. De hecho se trataba, en cambio, de los últimos episodios de una época que iba quedando atrás. Ya se estaba fraguando una «gran transformación» con todo el sentido que daba a esas palabras Polanyi. Ese nuevo capítulo en la historia del mundo comenzó con una grave crisis de la superpotencia estadounidense, cuando la URSS aún seguía prosperando. En 1968 Estados Unidos sufrió una seria humillación militar en Vietnam, acompañada de una oleada masiva de protestas domésticas, tanto contra la guerra como contra la situación de la población negra. Los descaminados intentos de la Administración Nixon de apuntalar su poder y la economía estadounidense tuvieron un espectacular efecto contraproducente en 1973-1975. Además de la aceleración de la inflación, la crisis del petróleo y el colapso del sistema de Bretton Woods, Washington tuvo que renunciar a los mecanismos de regulación económica y social que se remontaban a la Gran Depresión y a la Segunda Guerra Mundial. Del caos de ese período emergió finalmente el régimen global de mercados liberalizados que conocemos hoy. Debatiéndose por superar la crisis de comienzos de la década de 1970, Estados Unidos utilizó su posición hegemónica para poner en orden los recursos de sus numerosos aliados y clientes en un sistema que iba a invalidar el modelo de crecimiento económico nacionalmente limitado y de organización industrial fordista que hasta entonces había prevalecido en todo el mundo atlántico. En dos décadas de experimentación con nuevos tipos de políticas gubernamentales y empresariales, y de búsqueda de nuevas tecnologías y nichos de producción, se constituyó el nuevo régimen económico-político que distintas escuelas de analistas han apodado posfordismo, acumulación flexible o globalización. El nuevo orden mundial tenía poco que ver en realidad con las proclamaciones de moda de que la regulación burocrática se había sustituido por milagrosas empresas estrella y mercados autocompensados. De hecho, el impulso liderado por Estados Unidos para derribar las barreras económicas impuestas por los gobiernos nacionales puso los mecanismos de control en manos de burocracias privadas e internacionales mucho menos abiertas a presiones políticas públicas, mientras que las interacciones en el interior de la elite evolucionaban (o volvían) a un sistema de redes menos formales, siguiendo las líneas de Davos. A mediados de la década de 1980 ya estaban claras las líneas maestras del sistema globalizado emergente. El ciclo de desarrollo nacional había sacudido repetidamente el marco del mercado mundial capitalista; pero al fin y al cabo éste se demostró bastante elástico, y contrariamente a las previsiones de Schumpeter se benefició de hecho de las repercusiones de revoluciones y descolonizaciones. 


YÉLTSIN: RUSIA PIERDE LA GUERRA


...El Estado ruso afronta hoy día dilemas quizá más serios que nunca, no sólo por su abrupta disminución de tamaño, sino porque sus principales activos y orientaciones tradicionales se han visto drásticamente devaluados. El capitalismo en su forma globalizada es antitético a los imperios burocrático-mercantilistas especializados en maximizar el poderío militar y el peso geopolítico, objetivos en los que se empeñaron durante siglos los gobernantes rusos y soviéticos. 

...Económicamente, la restauración del capitalismo en Rusia ha demostrado ser un asunto ruinoso y purulento, sazonado con crimen y corrupción y lastrado por el deterioro de los índices sociales. A lo largo de la última década el PNB se contrajo, los salarios se desplomaron y disminuyó la población. En 2000 un tercio de ésta vivía por debajo del umbral de pobreza definido oficialmente, y la desigualdad en los ingresos se había triplicado. Al frente de ese escenario tan desalentador se encontraba un producto aberrante del ala siberiana del viejo PCUS. Como gobernante de la Rusia postsoviética, Yeltsin tenía una capacidad real, por limitada que fuera: maestro en las intrigas cortesanas y en la manipulación de sus subordinados, podía exhibir sus dotes de briosa improvisación y de voluntad absoluta cuando la ocasión lo requería. En otras circunstancias eso no habría compensado sus obvias deficiencias como líder: su codicia e incompetencia brutales, su chocarrería de alcohólico, sus largos períodos de inercia... En el sentido ordinario era bien poco lo que funcionaba adecuadamente con él. Tras enrolar y despedir a Gaidar como campeón de la «terapia de choque», pronto entró en disputas con el primer parlamento electo del país. Disolviéndolo por la fuerza de los tanques, impuso una constitución autocrática con un referéndum fraudulento, tras de lo 
cual desencadenó una desastrosa guerra en Chechenia. 

...En Rusia, la transición a una economía de mercado estándar habría sido en cualquier caso un proceso caótico y prolongado; pero su condición básica era un sistema político irreversiblemente comprometido con el capitalismo, y esto es lo que Yeltsin sí había logrado establecer cuando acababa su reinado. Pudo hacerlo, pese a la baja estima en que le tenía la mayoría de los rusos, porque contaba con el apoyo de las tres fuerzas decisivas del período: Occidente, los oligarcas y la intelligentsia.
El primero de los tres era con mucho el más importante. 

...Todo esto reproducía una situación semiperiférica bastante típica: una ambiciosa clase media de profesionales y pequeños propietarios al estilo occidental asume el papel de la burguesía tradicional al faltar esa clase capaz de limitar conscientemente, y finalmente democratizar, el poder autocrático.

En Rusia esta capa estaba ligada al Kremlin y su bandera tricolor neozarista por un doble lazo. Yeltsin, aunque había sido miembro del Politburó y no precisamente un intelectual, y desde luego no un liberal, se había alzado al poder, tras haber sido expulsado del liderazgo burocrático comunista, mediante su alianza con un bloque de reformistas ardientemente liberales dirigido por la intelligentsia. Había dirigido la resistencia contra el putsch militar de agosto de 1991 y había puesto fuera de la ley al PCUS. Pero por encima de esa deuda histórica, la legitimación y los recursos de Yeltsin –una vez que se hizo con el poder– venían sobre todo de Occidente, el punto de referencia fundamental para la intelligentsia por sus propias razones. Así, pues, por dudosos que parecieran sus planes, los intelectuales se sentían vinculados a él. Aun así, con el tiempo comenzaron a aparecer grietas entre ellos. De un lado estaban los que habían hallado puestos y beneficios en el propio régimen como consejeros presidenciales o de los magnates de los medios de comunicación, altos ejecutivos, etc. –entremezclándose con los nouveaux riches o «nuevos rusos» tout court—, mientras que otros, desgarrados por su lealtad a los antiguos ideales, se iban tornando cada vez más críticos. 


PUTINAZO: DEDAZO DE YÉLTSIN 


Ése era el contexto en el que las intrigas de palacio de Yeltsin de agosto a diciembre de 1999 –primero nombrando primer ministro a Putin, dimitiendo a continuación para convertirlo automáticamente en presidente–sorprendieron a los competidores políticos que maniobraban para sucederle en las elecciones de la primavera de 2000. El plan fue probablemente diseñado por los bien pagados esbirros del Kremlin (o «tecnólogos políticos» como prefieren llamarse a sí mismos los miembros de esa nueva camada de mercenarios intelectuales), en primera instancia para proteger a la «Familia» –Yeltsin y sus hijas, chambelanes como Chubais y los principales oligarcas– frente al riesgo de cualquier acción legal futura. El primer acto de Putin en cuanto entró en funciones fue, en efecto, garantizar a su patrón inmunidad frente a los tribunales. Aparentemente, la elección por el presidente de su sucesor recordaba la añeja práctica mexicana del dedazo. 

...frente a la relativa desinversión política por ese lado, Putin cuenta con una base popular más amplia, un control más firme de los aparatos institucionales y un mejor clima económico que los que Yeltsin haya disfrutado nunca. La Duma, que había sido una constante espina en tiempos de éste, es ahora una asamblea domada, con una dulce mayoría presidencial formada por burócratas ubordinados velozmente reclutados durante la triunfal marcha de Putin hacia las urnas. Los gobernadores provinciales, muchos de los cuales se habían convertido prácticamente en potentados locales autónomos en el período anterior, se han visto sometidos a la fiscalización de un conjunto de plenipotenciarios» del centro. Las emisoras "independientes" han sido hostigadas o neutralizadas, el Kremlin ha tomado el control de lo que una vez fuera el imperio de Gusinsky y ha utilizado a los medios de comunicación cada vez más venales para desacreditar o silenciar a la potenciales opositores. Esa recentralización en marcha del Estado ruso se ha visto facilitada por la bonanza económica de los últimos dos años, la depreciación del rublo a la quinta parte de su valor desde la quiebra de 1998 y el continuo aumento de los precios del petróleo. En 2000, por primera vez desde el colapso de la Unión Soviética, el presupuesto no mostraba números rojos, había un superávit en la balanza comercial y se registraba un crecimiento económico del 8 por 100. Se trata todavía de una recuperación frágil, pero suficiente para que la noten todas las capas sociales. 


EL CONTROL FINANCIERO DE LOS EE.UU. 


...Actualmente, otro intento de reorganización estatalista para restaurar la preeminencia geopolítica de Rusia sería un anacronismo. Con el fin de la Guerra Fría y la desaparición de la Unión Soviética, Rusia se halla en su nadir histórico: su demente martilleo del diminuto enclave checheno –unos pocos kilómetros cuadrados y unos pocos cientos de miles de nativos–, sólo se puede entender como una compensación patética e inconsciente de las enormes pérdidas que ha sufrido en suelo eslavo, donde la amputación de Ucrania y Bielorrusia ha reducido a Moscú a un perímetro más pequeño que en los días de Boris Godunov; un trauma tan profundo que el Estado todavía actúa como si aún sintiera el tirón de esos miembros. La terrible disminución sufrida no es sólo de tamaño, sino también demográfica. Diez siglos de incremento continuo de la población se han revertido ahora, cuando Rusia posee menos habitantes que Pakistán. Entre los activos clásicos de un Estado importante, sólo cuenta con un arsenal nuclear que se va oxidando, inútil para las operaciones externas a su alcance, es decir, pequeñas incursiones o bravatas en el Cáucaso o en Turkestán. Ahora ha renunciado incluso a la pretensión de monopolizar la interferencia en esas regiones. La razón para esa novedosa modestia no es difícil de deducir: el Estado postsoviético se ve severamente limitado por una drástica pérdida de autonomía financiera. La deuda externa convierte a Moscú en rehén de Occidente en un grado históricamente sin precedentes, ni siquiera cuando el zarismo en decadencia se vio obligado a aliarse con sus acreedores internacionales, renunciando a su rivalidad geopolítica con el Imperio británico y Francia en el período previo a 1914. Un siglo después, la dependencia económica de Rusia va mucho más allá de la debilidad general de los países periféricos frente a las firmas y mercados globales. 


PERSPECTIVAS VISTAS DESDE EL AÑO 2001


...Pero si se le cierra la opción imperial, ¿qué perspectiva le queda al capitalismo moderno en Rusia? No cabe duda de que van surgiendo poco a poco algunas de las condiciones para que se den patrones de acumulación más normales, y ése es uno de los significados de la «nueva estabilidad». Pero la mayoría de las empresas rusas son superfluas en el mercado mundial y siguen dependiendo de elevados niveles de protección doméstica. La fuerza de trabajo rusa, aunque barata comparada con la
occidental, es más cara y más indisciplinada que los depósitos enormes y fácilmente accesibles del Tercer Mundo. El país es actualmente atractivo para las corporaciones occidentales, tan sólo como plataforma exportadora de materias primas y como concentración potencial de consumidores. La producción industrial cayó a la mitad en la pasada década. Rusia se ha convertido otra vez en un típico productor periférico de materias primas, con poca capacidad de fabricación competitiva y niveles de servicios muy primitivos. Sus principales exportaciones actuales son: petróleo a Alemania, gas a Italia, prostitutas a Turquía y capital a Chipre. Si se mantuviera ese modelo, el régimen de Putin podría llegar a parecerse al de alguno de los mayores países latinoamericanos de antaño: un hombre fuerte con una fachada electoral, operando bajo una jurisdicción informal estadounidense, negociando con los caciques locales niveles muy bajos de impuestos internos, pero extrayendo la suficiente riqueza mineral como para mantener a raya a los titulares extranjeros de bonos y con los cofres del aparato coercitivo central repletos. En resumen, una especie de porfiriato, sin su espíritu de desarrollo, pero también sin su amenazante aunque difuso descontento popular. Sin embargo, el código genético de los Estados imperiales no se modifica tan fácilmente. 

...Los reflejos condicionados adquiridos durante siglos están profundamente insertos en una burocracia rusa que, por increíble que parezca, se amplió durante el mandato de Yeltsin. 


RUSIA COMO UN GENDARME PARA EL BRICS? 


Con el incremento de la globalización, el suministro de protección militar se podría convertir en un artículo comercializable, como ya lo fue a comienzos del mundo moderno. Los ejércitos rusos siempre han estado formados por soldados conscriptos, pero hoy día se habla de crear un ejército profesional. Si eso llegara a materializarse podría quizá contar con un prometedor futuro mercenario, mientras que el Estado asumiría, cobrando determinadas tarifas, los riesgos y brutalidades de imponer la estabilidad en algunos de los rincones más asquerosos del mundo. Ese devenir sería realmente muy ruso, pareciéndose a Turquía o México al principio, pero aplicando luego la coerción con diferentes propósitos. Si Putin resulta ser un gobernante siquiera moderadamente exitoso, el resultado probable de los próximos diez años será una Rusia proteccionista semiautoritaria, ineluctablemente corrupta, pero en cierto modo menos hundida, capaz de vigilar los restos de su inestable ex imperio.

martes, 21 de abril de 2015

Horda Tour, 11 dias/10 noches

Moscú - Nizhni Nóvgorod - Kazáñ - Volgogrado - Taskent - Samarcanda - Bujará - Taskent - Moscú

Después de conocer Niznhi Nóvgorod, que parece Moscú sin vivir el siglo XX, viajamos a Kazáñ, la antigua capital del Kahanato de los Tártaros de Kazáñ. Los tártaros de Kazáñ eran aliados de los mongoles y tan poderosos eran, que los rusos a los móngoles hasta los llamabamos "tártaros". De Kazáñ volamos a Stalingrado, que por cierto se encuentra muy cerca de la antigua capital de la Horda de Oro! Que simbólico: en la batalla de Stalingrado la Horda de Oro, Tercera Roma, Roma Tártara (la URSS) ha triumfado sobre el Tercer Reich.

El siguiente tramo de nuestro viaje es Uzbequistán, el país que obtuvo su nombre del khan Uzbek, cuyo gobierno marca la máxima prosperidad de la Horda de Oro. Conocemos el lado asiático de la cultura rusa. Conocemos Samarcanda, una de las ciudades más antiguas del mundo (contemporanea de la Roma Antigua), durante más de 2 mil años Samarcanda era el punto clave del antiguo Camino de Seda. Son temas de Tamerlán y dedecadencia de Asia, que sigue siendo la región muy importante, siendo el “hipogastrio de Rusia” e encrucijada entre Iran, India, China. “Balcanes de Eurasia”. El culto al huésped, cocina buenísima, alboroto de colores y también una potencial inestabilidad en un futuro próximo (en el marco del plan del Gran Oriente Medio).

Se puede pulsar en el mapa para verlo mejor

Pueden ver la presentación completa del "Horda Tour" en PowerPoint aquí:

martes, 17 de marzo de 2015

Eurodonbass

Amigos, he creado una nueva comunidad de facebook - Eurodonbass, una contraofensiva al Euromaidan.

La idea de esta comunidad es fomentar la restauración de las relacoines entre Rusia e Europa. Si el Euromaidan ha sido una bomba destinada para destruir una Europa fuerte y independiente, para arrastrarnos a una nueva guerra mundial, el Eurodonbass debe ser un modo de restauración de la soberania y paz en el continente.

Les invito al Eurodonbass para compartir los temas de la cooperación/colaboración entre las entidades europeas y rusas para superar la crisis, provocada por los banksters de los EE.UU y la UE con el fin de 1) una vez más destruir la Europa, 2) una vez más joder a Rusia para saquear sus materias primas y conquistar su mercado con la perspectiva de controlar los mercados de Asia.

Los temas del Eurodonbass:

1) ayuda humanitaria y voluntariado
2) evaluación del daño bilateral, provocado por la crisis,
3) movimientos europeos, que se han opuesto al Maidan y buscan el diálogo con Rusia, no guerra.
4) todas las actividades de Rusia y de Europa, cuyo objetivo es la paz y la restauración mutua, etc.

Lenguas: inglés e español

Atte.,

Vitaly Liózov, Guía de Moscú


miércoles, 31 de diciembre de 2014

en la víspera del Año Nuevo 2015


Creo que todos mentalmente pasamos el año 2014 en Ucrania. Lamento decirlo, pero creo  que hasta llegamos a acostumbrarnos al dolor y el terror, que viven los pro-rusos en el Este de Ucrania, diariamente bombardeados por el gobierno de Kiev, producto del golpe de estado del Febrero de 2014. ¿Por que no? ¿Acaso no estan acostumbrados los mexicanos, por ejemplo, a la trata de niños en los mercados de su país? No se puede aguantar este terror diariamente, la gente empieza a hacer la vista gorda.

Conforme a la OSCE el conflicto provocado por el Occidente en Ucrania ya se cargó de más de 4,5 mil personas sin hablar de los desaparecidos, heridos, etc. No es mucho, - pensaron los pasotas y siguieron hablando del enécimo iphone. Es verdad que el tráfico de droga en Rusia cobra 60 mil vidas por año, alrededor de 30 mil personas mueren anualmente en los accidentes de carretera. Muchos en Rusia aceptaron la estrategia de "no ingerencia" del Kremlin al conflicto en Ucrania.

Sin embargo todos se despertaron escaldados del agua fria en diciembre, cuando el rublo sufrió un ataque de los especuladores y todos los rusos que no tienen euros, ni dólares, nos volvimos 30% más pobres. Ahora se quedó obvio hasta para los alumnos de la primaria , que este conflicto reformatea todo el sistema de las relaciones internacionales. Es una durísima guerra económica, así que el conflicto "caliente" en Ucrania parece solo un fragmentito del cuadro.

Sobre todo se trata de una agresión contra Rusia por causa de su intervención NO COMPROBADA a la guerra civil en Ucrania. El golpe de estado en Kiev y la guerra civil desatada por el gobierno golpista fueron necesarios solo como un pretexto para quebrar/congelar todos los proyectos integradores de Rusia (Alianza Aduanera, Comunidad Económica Eurasiática, OTSC, el gasoducto South Stream, etc.). 

Es curioso que entre los descerebrados expertos pro EE.UU. había aquellos que afirmaron que el ex-presidente de Ucrania Yanukóvich fuera pro ruso. Vean como se comportan los pro rusos "más sertificados" tipo el "último dictador" de Europa - el presidente de Bielorrusia Lukashenko. Lukashenko se tima con la UE, seducido por la Asociación Oriental, diariamente echando mierdas sobre Rusia. Otro socio de Rusia - Kazajstan - echa la mano al complexo militar de Ucrania, el presidente Nazarbáyev manifestó su dispocisión a cooperar con Kiev en idustria militar.

¿Acaso los EE.UU. no se benefician de esta guerra? En primer lugar ellos ganan la Europa para sus proyectos energéticos y, por supuesto, ellos apuntan a Rusia. Con una nueva guerra los EE.UU. podrían resolver el drama de su deuda impagable ante el mundo. Se benefician los lacayos de los EE.UU - las elites del grupo "Intermarium". El nuevo grupo gobernante de Kiev (formado por los liberales pro EE.UU. y por los radicales nacionalistas) también esta super interesado en guerra. A todo vapor Kiev se absorbe por la OTAN: los EE.UU. lo abastecen con los créditos para comprar la chatarra militar en Polonia y en Lituania. Ya no son rumores, son declaraciones oficiales de la extinta "Repúbica de las 2 naciones" sobre el suministro de armas para Kiev. Los liberales estan felices de tal integración al "mercado global". Y los radicales estan entusiasmados por la posibilidad de cometer los crimenes de lesa humanidad. Entre más haya ataudes será mejor para la construcción de una nueva identidad rusofóbica para los pueblos de Ucrania. Además el terror contra 2 provincias rebeldes les garantiza la "paz" en las demás provincias pro rusas, que ahora tienen meido de revelarse. 

¿Quien sufre de esta guerra? Sufren los pueblos de Rusia, Europa y Ucrania. La buena noticia es que las élites de Rusia (a diferencia de las élites de Europa y de Ucrania) también sufren. La primera vez en los últimos 20 años las élites de Rusia se motivan para desarrollar Rusia, Ucrania y una Europa independiente - a grosso modo, se les bloquearon sus cuentas bancarias en los EE.UU./Suiza. El problema es hasta cuando las elites están dispuestas a sufrir. Y por supuesto entre ellas habrá elites pro EE.UU., por ahora disciplinadas por el grupo de Putin. La amenaza fundamental es la cisión de las élites.

Rusia necesita una Ucrania fuerte y pro rusa, una Europa fuerte y independiente. Que es imposible ahora. Entonces, si Ucrania es enemiga, la necesitamos débil. En este sentido el apoyo MORAL del gobierno de Rusia a Novorossia es entendible. Sin dudas, hay mucho apoyo a la causa de los pro-rusos en Ucrania de parte de la sociedad rusa (admito que hasta a nivel de los organismos de la fuerza provinciales existe cierto apoyo, pero es un apoyo voluntario y no comandado por el Kremlin, según mi experiencia personal, el Kremlin hasta obstaculiza tal apoyo). 

Al mismo tiempo nos preguntamos ¿si es productivo el proyecto de Novorossia? 

Inicialmente es un proyecto de los radicales ideologicamente confusos, pero pro rusos. La palabra clave es que son "pro rusos".

1) Primero ellos soñaron con repetir el guión de Crimea. Los pro rusos avisaron un referendum - sin embargo Rusia en seguida se distancionó de este asunto: Putin les pidió a las élites separatistas que aplazaran el referendum.

2) Después del referendum bajo el cañoneo diario de Kiev, las élites de las 2 repúblicas autoproclamadas quieren legitimzarse y ogranizan las elecciones. No obstante Moscú no las reconoce, solo dice que respeta estas elecciones.

3) Meintras las Repúblicas Autoproclamadas tratan de dominar el anarquismo a la Néstor Majnó, cada vez se vuelve más evidente que sin ayuda de Rusia son inviables.

Pero Rusia de Putin no necesitaba un protectorado en Ucrania, Rusia resultó ser involucrada por los radicales pro-rusos, los cuales (siendo inspirados por el caso de Crimea) apostaron sobre una posible revolución desde arriba en el Kremlin. En cabmio Putin, apretando el culo contra el taburete, no tiene prisa para liquidar el bloque económico-financiero, heredado del traidor Yéltsin, Putin sigue la linea liberal.

Son interesantes las declaraciones del lider moral de la rebelión de los pro-rusos, comandante Igor Strelkov: "Desde el inicio yo partía del hecho que se copiara el guión de Crimea - Rusia intervendrá. Esto sería la mejor opción. Y la población aspiraba lo mismo. Nadie se levantaba a favor de las repúblicas de Lugansk y Donetsk. A priori todos estaban a favor de Rusia. El referendum fue organizado a favor de Rusia y la gente venía a guerrear a favor de Rusia. La gente quería la reintegración con Rusia. Las banderas de Rusia estaban por todas partes. Sobre mi estado mayor fue enarbolada la bandera de Rusia y sobre los demás - también. Y la propia población nos percibía bajo las banderas de Rusia. Nosotros pensamos: vendrá la administración rusa, la retraguardia será organizada por Rusia y surgirá una república más en el marco de Rusia. Yo no pensaba en ninguna construcción estatal. Y luego, cuando yo entendí, que Rusia no nos tomaría consigo (me asociaba con la milicia), para nosotros esta desición fue un choque". Strelkov se asociaba con la milicia, pero la milicia y el pueblo lo asociaban con Rusia, porque el hombre se presentaba como un "coronel ruso". En cierto sentido, Strelkov fue un aventurero e impostor.

También es verdad que la gente de Donetsk y Lugansk con mucho gusto creen en la "mano del Kremlin" y la buscan, si no la inventan, creyendo en los cuentos de la prensa occidental. Así en Donetsk es normal escuchar las frases tipo "Que trabaje mejor el Voentorg!" (Voentorg es una red rusa de los almacenes para los militares, donde se venden cosas de la "destinación doble", ropa de camuflaje, sobre todo). La gente de Donetsk quiere creer en la ayuda militar de Rusia, porque de otro lado ellos ven la ayuda de los mercenarios de Polonia, por ejemplo, sin hablar de la ayuda con la técnica militar de los paises servilones de la OTAN.

Sea como sea la Ucrania otra vez entra en el periódo de la Ruina. Así se llamaba la guerra civil en el territorio de la actual Ucrania en 1657-1687, motivada por el conflicto entre las élites locales, apretadas entre Polonia y Rusia. Les recuerdo que unos años antes en 1612 los polacos casi consiguieron dominar Rusia con ayuda de una parte de los tatarabuelos de los ucranianos de hoy. Es decir que la Ruina ucraniana esta dirigida directamente contra Rusia.

Mientras el Occidente realiza su enécimo Drang Nach Osten, Rusia igual como en vísperas de la Gran Guerra Patira debe tratar de ganar tiempo para remodernizar su ejército y su economía. El costo de esta remodernización RETRAZADA son miles de vidas de los pro rusos en el Este de Ucrania. Son voluntarios despistados en las tinieblas de la Ruina - después de sacar unas fotos con armas unos se van para sus hogares, otros se quedan, esperando la intervención de Rusia, otros regresan a sus casas en ataudes o desaparecen. Los nuevos grupos gobernantes de Donetsk y Lugansk urgentemente necesitan recursos para conservar el control sobre los territorios y sus ejércitos-milicias (con tendencias anarquistas, porque Novoróssia también fue la patria de Néstor Majnó). Esperamos que los rumores sobre un gasoducto, que constuye Rusia para Lugansk y sobre el suministro de la energia desde Rusia para las repúblicas autoproclamadas no sean mentiras. Esperamos que ganen los pueblos y no las oligarquías. Creo que los intereses de los pueblos otra vez se conectan con Rusia. Igual que a principios del siglo XX Rusia sigue siendo el representante global del pueblo trabajador y del indigenismo opuesto a la oligarquia cosmopolitana.

Las imagenes apocalípticas de Moscú son de Vladímir Maniújin.

lunes, 16 de diciembre de 2013

Ucrania, al borde del suicidio

Unos textos razonables entre millones de gigabytes de la propaganda:





NB: El nacionalismo actual de Ucrania es absurdo, porque su primer objetivo es camibar la clase gobernante étnicamente ucraniana por la europea, es un nacionalismo abandonista que rechaza su propia identidad a favor de una nueva y super abstracta identidad "europea". Es iróncio que el lider de los amotinados en Ucrania era un boxeador ucraniano de la ciudadania alemana, no comentamos la presencia física entre las filas de los golpistas del ministro de las relaciones exteriores de Alemania Guido Westerwelle, de la portavoz del Departamento de Estado de los EE.UU Victoria Nuland, del viejo loco John McCain sin hablar sobre los fracasados en sus paises ex primer-ministro de Polonia Yaroslav Kachinski e ex presidente de Georgia Mijail Saakashvili. Es también muy metafórica la destrucción del monumento de Lénin en curso de las revueltas: justo Lénin fue uno de los principales constructores de la nación ucraniana: destruyeno su monumento los golpistas destruyen su propia nacionalidad.

Por cierto, los nacionalismos bálticos tuvieron la misma naturaleza abandonista, no es de sorprender que dentro de la UE sus esquisofrenias se agudizaran hasta los primeros puestos por el índice de los suicidios en el mundo.

Es importante saber que todas las élites ucranianas estan infectadas por el "nacionalismo absurdo". Aunque la Asociasión Europea aun no se trate de la cooperación militar (se trata de abrir el mercado sin recibir ningunas compensaciones), es lógico esperar la absorción militar de Ucrania en un futuro próximo. Desde 1997 las élites ucraninanas (el grupo de Yanukóvich que gobierna hoy incluido) colaboran con la OTAN: Ucrania participa en la misión en Afganistán, etc. Ucrania ha ofrecido a la OTAN sus territorios para las bases que se retiran de otros paises, también serían bienvenidos los entierros de desechos nucleares. No es la primera vez cuando la esquizofrenia de Ucrania se manifiesta en forma de motines. En fin las élites rusas padecen el mismo trastorno existencial, cortado temporalmente con petrodólares y carisma de Vladímir Pútin.

Es lógico esperar el siguiente golpe del nuevo "Drang Nach Osten" en el Cáucaso. Después de Ucrania vamos a ver el boicoteo de los Olímpicos en Sochi y me temo que en seguida entremos en la guerra del Cáucaso (es un juego muy interesante para Turquía, y también es posible que para Iran que siempre mantiene el diálogo con el Occidente. El golpe de las revueltas caucasianas sacudirá todos los régimenes de la Asia Central, se producirán las nuevas olas de los inmigrantes para Rusia. Y los inmigrantes hoy en día pueden ser también una arma de destrucción masiva: monedas falsas destruyen el mercado financiero, los inmigrantes destruyen el mercado laboral. Obviamente vendrá más droga de Afganistán y vivirémos más atentados en las ciudades rusas). Ojala que yo no tenga razón y que toda la agresión del Occidente se limitará con el tema de LGBT.

Las fotos de la Plaza Maidan en Kiev, donde se reunió la gente más "europeizada" de Ucrania: http://stainlesstlrat.livejournal.com/514482.html

martes, 15 de enero de 2013

¿Moscú o Moscustan?

"La inmigración descontrolada es uno de los males que aquejan a Rusia, puesto que se traduce en la llegada al país de grandes cantidades de trabajadores no cualificados de ex repúblicas de la URSS, que, por su parte, se ven obligados a emigrar como consecuencia de un modelo decadente de la economía en el espacio postsoviético.

“El inmigrante no es ni amigo ni enemigo, en muchos casos, es una víctima y un rehén del actual modelo socio-económico de desarrollo en Rusia y la Comunidad de Estados Independientes”, dice Yuri Krupnov, el director del Instituto de Demografía, Migración y Desarrollo regional de Rusia.

Explicó que a causa de una prominente desindustrialización de países que otrora formaron parte de la Unión Soviética y el modelo unilateral de exportación de crudo que tiene Rusia muchas personas de la región se ven obligadas a elegir una vida nómada y ganarse el pan fuera de sus respectivas patrias. Ese flujo caótico de la mano de obra no cualificada, por una parte, consolida una economía tecnológicamente atrasada, y por otra, aumenta la competencia en el mercado laboral, en detrimento de la población autóctona.

Pero, en opinión de Krupnov, los inmigrantes no tienen la culpa de la situación, puesto que llegan a Rusia empujados por unas condiciones de vida sumamente desfavorables en sus países de procedencia. 


la fiesta de Kurban Bairam en Moscú, 2012
Es curioso que una de las prioridades del Ministro actual de los Asuntos Interiores Vladímir Kolokóltzev es la lucha contra la delincuencia étnica. Según los datos de la Dirección capitalina del Ministerio de los Asuntos Interiores, los inmigrantes son autores de casi el 20% de los crímenes, registrados en Moscú. El 30% de los crímenes se cometen por los ciudadanos rusos de otras ciudades, es decir por los inmigrantes interiores (con frecuencia tampoco rusos étnicamente). Así, resulta que son el 50% de los crímenes, que se cometen por los no moscovitas en Moscú, el problema es que se trata sobre todo de los crímenes duros. Así el 70% de los asesinatos en Moscú se realizan por los no moscovitas. Para suavizar el problema de la inmigración (generada por la degradación económica), que se persibe ante todo por los datos de la delincuencia étnica el presidente Vladimir Pútin ofreció no mencionar la etnidad de los delincuentes en las noticias.
el 31 de diciembre de 2012, la Plaza Roja llena de los inmigrantes


A mi juicio, los inmigrantes moscovitas es la gente más feliz de Rusia, se adaptan muy rápido (el islam no les importa para aprender a tomar vodka). Al haber escapado del infierno ellos de pronto encuentran a si mismos en una de las ciudades más maravillosas del mundo, normalmente trabajan al aire libre (mejor si no es un trabajo muy duro, por ejemplo, si hablamos de los limpiadores), siempre andan en bicicletas, todo el verano juegan al futbol (hasta me pregunto, cuando trabajan? de donde sacan las fuerzas para jugar tanto), pronto aparecen niños, estan en los parques, tomando cerveza, con niños jugando... Pero esta bien... Si no hay amigos, palancas, conecciones, no queda otra opción que traficar, robar, prostituir, matar o trabajar muy duro... Y como las cantidades de los recien llegados del infierno se aumentan muy rápido, Moscú se vuelve un Moscustan. Hasta los datos oficiales son muy diferentes dependiendo del año y del humor del jefe del Servicio Federal de la Migración, las cifras se varáin entre 5 y 20 millones de los inmigrantes, que ya estan en el país.

sábado, 22 de diciembre de 2012

Acerca de la Rehabilitación de la URSS


Tengo presentimiento que la élite actual ha decidido rehabilitar poco a poco el pasado soviético.

El acontesimietno central en la televisión rusa de los últimos años fue el show "El Tribunal del Tiempo" (en 2010), en las tarimas del cual la primera vez desde 1985 aparecieron  los filósofos y polítologos no liberales. Así el discurso partiota y pro-soviético fue legitimado en la escala nacional.

Desde el mismo 2010 cada 9 de mayo a las calles de las ciudades principales del país salen los stalinobuses, pagados por los entusiastas.

Aun antes se activó la idea del Museo de la URSS. El primer museo de este tipo fue inaugurado en la ciudad de Novosibirsk en 2009, organizado por los entusiastas igual que el proyecto del Stalinobus de la Victoria. Cada vez más son notorios los síntomas de la nostalgia pro-soviética.

 
Es decir que el gobierno con sus pasos retrasados "de consentimento" solamente intenta dominar el sentimiento popular, ignorado y bombardeado por los desestalinizadores tanto tiempo.

Por supuesto, que el "comunismo mola": a finales de 2012 en el Manezh de Moscú los entusiastas han inagurado la exposición "El diseño soviético", que tiene muchísimo éxito. La exposición fue organizada por el llamado Museo de Diseño (que de hecho es solamente un proyecto del Museo-Bus, el cual según los autores tendría que circular por los parques, orfanatos, hospitales del país etc., popularizando la idea del diseño nacional - no obstante los entusiastas fueron apoyados por los peces gordos y como concecuencia "El diseño soviético" esta alojado por el Manezh de Moscú, uno de los mejores escenarios de la capital). 

Unos dias más tarde en el centro "Obrero y Koljoziana" fue inaugurada la "Venus Soviética", una exposición, dedicada a la imagen de la mujer en el arte de la URSS.

Mientras los medios gubernamentales orientados al público extranjero siguen en la onda de Perestroika (satanizando lo soviético, reduciendo lo nacional hasta lo etnográfico, masturbandose con los ideales de la economía de mercado), dentro del espacio informativo nacional el bloqueo de los neoliberales fue roto por la emisora de radio "Rússkaya Sluzhba Novostei", por unas revistas patriotas y por varias centenas de los proyectos "rojos" en el internet. Y esto ya no es algo impredecible como "El Tribunal del Tiempo", cerrado y criticado por todos los "líderes" de la "opinión pública"... Son proyectos que funcionan ya varios años, que tienen su demanda y que estan trabajando en serio con la conciencia de la gente sin manipularla como la "televisión amarilla".

Parece que en este contexto la idea del Museo de la URSS haya llegado al nivel nacional. La necesidad del reconocimiento de la URSS se formula tanto por los liberales pragmáticos: "Lo único que nos hace interesantes hoy es la URSS", como por los conservadores pro-soviéticos (del Club de Izborsk, por ejemplo). "Ante todo el museo tiene que presentar a las generaciones nuevas los logros de la URSS, - dice uno de los de Izborsk, historiador Andrei Fúrsov. - Este museo tiene que convertirse en el antídoto contra las patrañas de la falsa propaganda occidental y contra la nuestra pro-occidental "quinta columna", que ennegrece la Unión Soviética. El museo tiene que contar la verdad sobre la URSS, la que ha sido trastocada durante los últimos 20-25 años. En su tiempo a nuesto difunto filósofo A.Zinoviev le preguntaron:

- ¿Usted defiende el comunismo? 
- No, solo defiendo la verdad sobre el comunismo".
 
Y justo estos dias en uno de los pabellones de la expo VDNKh aparece un Museo de la URSS. ¿A ver si es justo aquel con el cual han soñado los filósofos de Izborsk o es simplemente una iniciativa de los mercachifles que quieren capitalizar la nostalgia? Sea como sea, todo esto parece ser una humilde tendencia de la recuperación. Y la próxima temporada turística en Moscú me parece muy prometedora. 

No es de sorprender que Hillary Clinton esté muy alerta, la porbrecita después de haber descubierto mi blog se cayó de la silla y tuvo la conmoción cerebral.

P.S.

Hasta Vladímir Putin últimamente tiene sus revelaciones, en uno de estos días dijo que el Mausoleo de Lenin corresponde a las tradiciones ortodoxas de la veneración de las reliquias intactas de los santos. Lo que es absolutamente obvio para todos los que saben que país fue Rusia en los 1920 y cuan venerado tuvo Lenin entre los campesinos analfabetos y ortodoxos, desepcionados por la Iglesia Ortodoxa los Románov, inspirados por el nuevo proyecto del comunismo ruso.