Eugenia Jásis, nacionalista rusa,
condenada a 18 años (a su esposo civil le dieron 20) por el asesinado
de un liberal abogado odioso, se encuentra en la misma correccional que una de
las Pussy Riot. Por cierto la correccional esta ubicada en la República de
Mordovia - hace poco el gran frances Gérard Depardieu también se
alojó en la capital de esta región rusa - en Saransk; por lo menos allí le ofrecieron
un apartamento (¡que tontería! pero así fue el cuento de Navidad de 2012/2013).
Eugenia Jásis a
base de sus impresiones del caso "Pussy Riot" y de sus charlas
con una de las pussy, su compañera de fatigas escribió el texto, que les ofrecso abajo:
"El proceso contra Pussy Riot,
cubierto por todos los medios de comunicación sin excepción, en realidad tiene
enorme importanica solo para la agenda de las grandes ciudades capitalinas y no
tiene nada que ver en absoluto con el resto de Rusia.
"Pússiki" como las
llaman aquí en nuestra correccional IK-14 de Mordovia alteraron y inquietaron
mucho las mentes de la "clase creativa", pero no cambiarón para nada
el rumbo del barco estatal, porque Rusia detras del MKAD <la carretera de
circunvalación de Moscú> no entendió nada de su mensaje si suponemos que
allí escucharan algo de su acción.
Me ha gustado como comentó este
tema en la revista "Experto" Maxim Kántor: "No vale la pena dar su vida
por un coño pintado en la pared por la misma razón por la cual no vale
reconocer el dominio del rico sobre el pobre o ventajas de una canalla ante un
profesor. La razón se explica muy sencillamente: es el respeto de los valores
espirituales. Cuiden la fuerza del protesta. La sociedad necesita esta fuerza.
Na hay que dar su vida por un bellaco que caga en el museo. Busquen otra causa más digna para usar su vida".
La acción de Pussy Riot es baladí
y estupida desde el punto de vista del alcanzamiento de sus objetivos. Igual
que son baladí y esupidas muchas otras acciones de autosacrificación
semejantes. Pido que consideren como el colmo de iditiosmo el mi propio caso -
el "caso de Tijonov - Jasis" <asesinato del abogado odioso>. Estos sacrificios se
entienden solo por aquella parte de la sociedad, de donde proceden sus
"protagonistas".
Pero la Rusia Grande no los entiende.
Aquella Rusia Grande, en el nombre de la cual todos los "protagonistas"
realizan sus "hazañas". Para Rusia detras del MKAD cualquier proceso semejante
equbale por su importancia a un proceso penal en alguna parte de Kazajstan. A
veces Kazajstan incluso esta más cerca que Moscú geograficamente. La gente de esta
Rusia Grande "escuchó algo" de las noticias tanto de Moscú como de
Kazajstan, pero no les prestó ninguna atención. Porque nuestro país ya desde
hace mucho no es unido por dentro. Es una Rusia no unida. No nos escuchamos y
no nos entendemos, como si hablaramos idiomas diferentes.
Me acuerdo de mi diálogo con el
investigador Ígor Krasnov, que llevaba nuestro caso:
- ¡Te mandaré a Dagestan para que te desgarren allí!
- ¡Vete tú mismo para allí, estoy bien aquí en Rusia!
- ¡Estúpida! ¡Dagestan también es Rusia! Estudien mejor geografia, nacionalistas jodidos. ¡Al calabozo!
Sé perfectamente la geografía. Por
supuesto Krasnov lo entendía y por eso se quedó cortado. Para mí Dagestan no fue
Rusia. Para esto hay muchas causas - las bastará para escribir un libro. Pero
ahora no hablamos de esto. Esto es para los numerosos departamentos de la política
nacional y los demás expertos de las relaciones interétnicas. Estoy hablando de
la profunda ruptura entre la capital y las regiones.
En la correcional, al estar
en la República de Mordovia y no en Moscú o San Petersburgo, la primera vez en
mi vida he escuchado: "Aquí en Mordovia es así, para tu información esto
no es Rusia". Y tales discursos los escucho bastante, hasta: "vinieron
demasiados a nuestra Mordovia de su Rusia". Es lo que se refleja de la opinión, que
"Mordovia obscura no esta a nivel de nuestra Rusia". Según las habitantes de otras regiones que también fueron llevados por
su destino a Partz <la ciudad donde se encuentra la correccional IK-14>,
de la misma manera piensan en los demás "sujetos de la Federación".
Cuando veo por la tele las
noticias federales (el 80% de ellas son acontecimientos de Moscú) - las demás
presas bostezan. Cuando ellas ven las noticias regionales - es mi turno para
bostezar. Nuestros intereses no se coinciden, a mí no me interesan sus
problemas, a ellas no les interesan los míos. A veces estamos dispuestos a
recibir como a los "nuestros" (aquí se dice "so-sudar") a la
gente de Sochi - por los Juegos Olímpicos, a la gente de Yaroslavl - por la
tragedia con el equipo de jockey estrellado, hasta a los costeños - por la cumbre de APEC. ¡Es
increible! Pero sí, es verdad, que tales acontesimientos despiertan en las
"regiones osbcuras" las inesperadas oleadas del patriotismo.
Sin embargo, es una indentificación
temporal y eventual de "sí" con "ellos". Pero siempre de "sí" y siempre con "ellos".
No hay ningunos panrosianos
rosianos <en la lengua rusa el término "ruso" esta marcado énticamente:
los rusos como regla son los rusos étnicos, las demás énticas que viven en Rusia
tienen otros nombres, durante la URSS se formaba la nacion civil de la gente
soviética a base de la cosmovisión del comunismo ruso, ahora los soviéticos se
quedaron difamados completamente y estan en vias de extinción, la élite post
soviética trata de formar la nueva nación de los llamados "rosianos",
que sean los rusos y las demás étnias que viven en Rusia unidos a base de la
construcción del capitalismo>, hay "nosotros" y
"ellos". Pero esta segregación se realiza no por el carácter étnico/nacional,
sino eminentemente por el índice regional. No vivimos en Rusia, sino en la "Unión
de Rusia", que se convierte drasticamente en una "Confederación
Rusa". Parece que todos estemos juntos, pero ningún moscovita autorespetado no
va a equiparar a sí con el habitante del pueblo "Vodkajodidonsk". Los
vodkajodidonses en su turno de la misma manera se relacionan con Moscú,
sufriendo una mezcla de envidia y desprecio por su pobreza y desesperación
rodeante.
Justo por eso todas las danzas de
la "clase creativa" - "la Plaza de Pantano", "la
avenida Sájarov", "Pússiki" etc. - son acontecimientos de una
importancia territorial muy limitada. Son importantes para Moscú - San
Petersburgo y pasan desapercibidos o percibidos negativamente por el resto del
país.
En los medios hablan mucho de las
causas y concecuencias de las punk-danzas en la JeJeEs <así suena la sigla de
la Catedral de San Salvador en ruso, resulta despectivo>. Se recuerdan
Luzhkov, Pútin, la gente gobernante de grados diferentes, funcionarios de la
iglesia en limuzinas y que sean otros carajos. Hasta Madonna. Todo este
vinigret político y garrapatos analíticos son poco claros para el 90% de la
población del país. Para el país JeJeEs no es La Iglesia Ortodoxa Rusa, no son
popes en limuzinas, no es pasado sanguinario, ni presente perverso y hasta no es
un monumento histórico, erigido en honor de la victoria contra Napoleón de
1812. Es simplemente un templo, y relación al templo en la Rusia Grande es delicada.
Allí donde hay un solo templo en
el pueblo, en el cual bendecían a los abuelos que se iban a la guerra, donde es
escondían del poder, donde bautizaban a los niños, donde se despedían de los
padres y pedían perdon, a donde iban con lagrimas a por esperanza. Para esta
gente el templo es sagrado. Esta gente no entiende que pueda ser de otra
manera, que el templo pueda ser política y los jovenes que bailan en el templo
puedan ser víctimas.
¿Saben por que estos clamorosos
procesos políticos pasan en Moscú? Porque si a algún niño de pocas luces se le
ocurriera a organizar algo semejante en el templo de un pueblo - los mismos
lugareños lo castigarían en la reunión del pueblo. Sin ruido, sin telecámeras y
sin Madonna. Y no hubiera otra opinión. Hay verdaderos valores espirituales sin
análisis sobre su utilicio o nocividad. Y justo gracias a este eje espiritual
nuestro país aun existe.
El equipo putiniano lo entiende
muy bien y agarra su regalía en 60-80% de los votos en la Rusia Grande (aquí en
Mordovia - 87%), el colectivo "Uralvagonzavod" <es una fábrica de Urales
cuyos trabajadores ofrecieron al presidente Pútin en el caso extremo venir a
Moscú para calmar a los grupos agresivos de la oposición> empieza allí,
donde se terminan los salarios de Moscú y donde a la gente no les interesa la agenda
de la revista "Esnob". Los liberales, nacionalistas, izquierdistas de
Moscú se ocupan exclusivamente de la autoadmiración, intentando "despertar
el país", esperando en vano que el "se despierte" y "comprenda".
Con esto los actores capitalinos lo hacen de la manera muy original: pintando penes en los puentes, bailando en el templo, matando en las calles a los que no
se parecen a ellos y no "comprenden". Al mismo tiempo a la Rusia
Grande le importa un bledo todo esto, ella tiene sus propios problemas. Todo el
país simplemente vive sin planear la vida. Vive una vida real con sus problemas
mucho más fuertes que el bosque de Jimki <se trata de un movimiento
ecológico moscovita que pronto se fundió con la oposición liberal>.
Si en realidad queremos conservar
el Gran país y el Gran pueblo, es la hora para empezar a hablar en lengua comprensible
por este país. Hablar no de lo que nos preocupa a "nosotros", sino de
lo que es importante para "ellos". Solo al estudiar con atención la Pirámide
de Maslow, nusetros "activistas creativos" podrían ofrecer un
alternativo camino de desarrollo para el país, interesante para el pueblo.
Mientras tanto la "Plaza de
Pantano" esta luchando por lo que en la Duma se refrescen no los parásitos
que ahora estan allí sino otros. Los más radicales luchadores estan a favor de
la libertad de las renuniones - como resultado todos ellos simplemente no
existen para la Rusia Grande.
Cuando los nacional-bolcheviques
luchaban contra la eliminación de los subsidios - la Rusia Grande los escuchaba
y los observaba con esperanza, porque ellos fueron representantes y expresores de sus
intereses. A veces cuando hablo de la "política" con los presos y menciono
la sigla del partido prohibido NBP <El Partido Nacional Bolchevique fue
uno de los fenomenos políticos más importantes de los 90>, veo que lo único
que la gente escuchó de él fue "el escritor Limónov" <uno de los
más grandes que viven ahora, fundador del NBP> y
"lucharon contra la eliminación de los subsidios". Pero nadie escuchó
de la "Estrategia 31" <la lucha por la libertad de las reuniones, garantizado por artículo 31 de la Constitución Rusa: cada día 31 los ex-nacional-bolcheviques
intentan reunirse en la Plaza de Triumfo sin permiso de la alcaldia y
terminan el día en la policía>. Cuando empiezo a hablar de la importancia de
la libertad de reuniones me siento una idiota.
Así vivimos. La agenda de Moscú
no les interesa a las regiones, no nos escuchamos unos a otros y ellos con poca
simpatía hacía Putin (que frustró sus esperanzas) van a votar por él, porque
los niños sanguinarios (nacionalistas) sobre un fondo con los penes pintados (liberales)
para ellos son peor.